Dosier Esclavitudes: entre dones, trabajos y museos
Convocatoria de artículos y reseñas (envíos hasta el 1 de diciembre de 2024)
En la actualidad, las relaciones de dependencias manifiestan diferentes inscripciones culturales como lo podemos ver en las deudas, las obligaciones, los pagos, los contratos, los saludos, las traducciones, entre otras. Sin embargo, a lo largo de la historia hay una forma de dependencia que destaca a nivel planetario, nos referimos a la esclavitud un fenómeno cultural que viene ocupando un espacio de reflexión e investigación preponderante en los últimos años.
En la Antigüedad las diferencias entre servidumbre y esclavitud eran notorias en Macedonia, pues el primero podía acceder al espacio público a diferencia del esclavomercancía que quedaba complemente excluido (Beltrán et al., 2012). Si bien la esclavitud ha ocupado gran parte de los estudios coloniales, generalmente abordados dentro de un enfoque del sistema moderno/colonial, actualmente los enfoques decoloniales están ampliando la mirada del sujeto esclavo/afrodescendiente hacia nuevas narrativas y formas de resistencia. Las formas modernas de esclavitud confirman que es un fenómeno a estudiar donde “no se puede definir al esclavo elaborando una lista mínima de sus limitantes jurídicas que afectaría a todos los clasificados bajo el mismo término” (Testart, 2018: 32, traducción personal). El hecho de no tener derechos por sobre otro no es un criterio suficiente para diferenciar al esclavo del que no lo es, o al esclavo del siervo en el contexto de la sociedad feudal europea (Bloch, 1939).
De hecho, la esclavitud, o mejor dichos las esclavitudes, reúnen complejidades en su estudio, haciendo necesario enfoques interdisciplinarios, multidisciplinarios y transdisciplinarios reuniendo miradas desde las ciencias sociales, las ciencias naturales, las humanidades y las artes. Ciertos estudios han marcado formas metodológicas importantes como es el caso de la Biografía de un cimarrón (Barnet, 1966), cuyo tratamiento narrativo de la historia de vida de Esteban Montejo, marcó un momento clave en la discusión sobre la esclavitud en América Latina, dando inicio a la llamada novela testimonial.
En diferentes capítulos de la esclavitud podemos observar transacciones aún inscritas en placas como lo podemos observar en la plaza de Comercio de Lisboa o la Plaza Vieja de La Habana, donde se vendieron esclavos durante más de 300 años. La figura del esclavo también puede ser abordada de las teorías del don y de la mercancía, con el objetivo de profundizar en el sentido de las acciones de donar, vender, comprar e intercambiar, y de los valores de uso y cambio contendidos (Testart, 2006; Godelier, 2022).
La esclavitud también puede ser abordada desde sus actuales formas culturales observables en museos y colecciones donde se exhiben, por ejemplo, piezas arqueológicas y/o de arte africano como el Forum Humböldt, el British Museum, el Louvre, el Prado o el Museo Real de África Central, mejor conocido como Africa Museum de Bruselas, por mencionar algunos. Si bien pueden inscribir dentro de procesos de usurpación colonial, no son resultado directo de un fenómeno de esclavitud. En este contexto cabe señalar algunas colecciones de América Latina como es el caso del Museo del Oro en Bogotá, Colombia, un museo ubicado en el segundo piso del Banco de la República en Bogotá compuesto de 38.500 artefactos de oro, el mineral más relevante al momento de comenzar a estudiar la esclavitud y sus efectos en América Latina. Un caso ha sido estudiado por Michael Taussig (2020) en torno al cual se pregunta por qué este museo “no tiene nada sobre la esclavitud africana o sobre la vida de estos mineros de oro cuyos ancestros fueron comprados como esclavos para explotar el oro” (Taussig, 2020: 41).
Le esclavitud puede ser leída, por ejemplo, desde los desplazamientos de personas capturadas por diferentes actos violentos que llevaron a mujeres, hombres, niños y familias enteras de África a Europa y América. Desde el Golfo de Guinea a Lisboa, Alicante, Cuba, Brasil, Ecuador, Chile, Perú, Colombia, Venezuela, Estados Unidos, Canadá, por mencionar las principales destinaciones señaladas en la Ruta transatlántica de la esclavitud.
En este marco la UNESCO inauguró en 1994 el programa Las Rutas de las personas esclavizadas: resistencia, libertad y patrimonio. Un programa que celebra su 30º aniversario con el objetivo de profundizar la producción de conocimiento en torno a uno de los principales fenómenos que ha marcado el desarrollo de la humanidad a escala planetaria1.
El presente número de Sur y Tiempo busca indagar, desde una mirada interdisciplinaria, en diferentes formas de esclavitud, como son el don, la mercancía y los museos, pues configuran importantes unidades de estudio de nuevas miradas y lecturas sobre un fenómeno cultural aún presente en racialización de las formas sociales.
Bibliografía
Barnet, Miguel. 2016 (©1966). Biografía de un Cimarrón. La Habana: Letras cubanas
Beltrán, A., I., Sastre., M. Valdés (dir.) 2012. Los espacios de la esclavitud y la dependencia en la Antigüedad. Besançon, Presses universitaires de Franche-Comte
Bloch, Marc. 1994 (©1939). La société féodale. Paris: Albin Michel.
Godelier, Maurice. 2022. L’énigme du don. Paris: Champs essais.
Ortiz, Fernando. 1990. Glosario de Afronegrismos. La Habana: Editorial de Ciencias Sociales.
Ortiz, Fernando. 1967. Los negros esclavos. La Habana: Editorial de Ciencias Sociales.
Ortiz, Fernando. 1963 (©1940). El contrapunteo cubano del tabaco y del azúcar. La Habana: Consejo Nacional de Cultura.
Testart, Alain. 2018. L’institution de l’esclavage. Paris: Gallimard.
Testart, Alain. 2006. Des dons et des dieux. Paris: Éditions errance.
Taussig, Michael. 2021. El diablo y el fetichismo de la mercancía en Sudamérica. Madrid: Traficantes de sueños.
Taussig, Michael. 2020. Mi Museo de la Cocaína. Cauca: editorial Universidad del Cauca
Linkografía
https://www.unesco.org/es/routes-enslaved-peoples
Leer más acerca de Dosier Esclavitudes: entre dones, trabajos y museos